Descubre cuántas vidas tiene un tambo metálico, así puedes aprovecharlas al máximo

Seguro has visto esos robustos cilindros de metal en fábricas, talleres o incluso transformados en originales muebles. Los tambos metálicos son mucho más que simples contenedores; son guerreros del almacenamiento con una capacidad sorprendente para reinventarse. Pero, ¿Cuántas veces pueden realmente rehusarse antes de decir adiós? A continuación te respondemos está duda recurrente.

Durabilidad del Material Metálico como Base para la Reutilización

La capacidad de los tambos metálicos para ser reutilizados se fundamenta en la inherente resistencia y durabilidad del acero. Este material, con un mantenimiento adecuado, exhibe una notable longevidad y puede contener diversas sustancias sin una degradación prematura, lo que posibilita su empleo en múltiples ciclos de uso.

Factores Determinantes en la Reutilización de Tambos Metálicos

La cantidad de veces que un tambo metálico puede ser reutilizado no se establece mediante un límite numérico fijo, sino que está intrínsecamente ligada a las siguientes variables:

• Naturaleza del Contenido Original: La composición de la sustancia previamente almacenada influye directamente en el potencial de reutilización. Tambos que contuvieron materiales no corrosivos presentan una mayor viabilidad para usos posteriores en comparación con aquellos que almacenaron químicos agresivos.
• Protocolos de Mantenimiento Implementados: La aplicación de procedimientos de limpieza exhaustivos tras cada uso y la implementación de medidas preventivas contra la oxidación y daños físicos son cruciales para prolongar la vida útil del tambo.
• Aplicación del Nuevo Uso: La exigencia del nuevo uso al que se destinará el tambo es un factor determinante. El almacenamiento de materiales sólidos no corrosivos impone una menor demanda en comparación con la contención de líquidos o la exposición a procesos industriales intensivos.
• Integridad Estructural y Condición Física: La presencia de deformaciones, óxido significativo o daños estructurales puede comprometer la seguridad y funcionalidad del tambo, limitando su potencial de reutilización.

En términos generales, un tambo metálico que ha tenido un mantenimiento apropiado y se utiliza para contener sustancias no agresivas puede ser reutilizado en múltiples ocasiones, superando potencialmente los cinco o diez ciclos de uso. No obstante, una inspección rigurosa de su condición es imperativa antes de cada nueva aplicación para garantizar su integridad y seguridad operativa.

Consideraciones Críticas de Seguridad

Es fundamental observar estrictas precauciones de seguridad al considerar la reutilización de tambos metálicos. Bajo ninguna circunstancia se deben reutilizar tambos que hayan contenido sustancias peligrosas para el almacenamiento de productos destinados al consumo humano o animal, como alimentos o agua potable. La potencial contaminación residual representa un riesgo significativo para la salud.

Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida por Alveo Trafiplastic (@alveo_trafiplastic)

Soluciones Integrales de Tambos Metálicos y de Plástico

En Alveo Trafiplastic, reconocemos la importancia de proporcionar tambos duraderos y confiables para diversas aplicaciones. Nuestra línea de tambos metálicos se fabrica con acero de alta calidad, asegurando resistencia y una prolongada vida útil para usos industriales y comerciales.

Adicionalmente, ofrecemos una extensa selección de tambos de plástico, que proporcionan una alternativa más ligera, de fácil manipulación y con una alta resistencia a la corrosión. Disponemos de la versatilidad y durabilidad necesarias, en el material que mejor se adapte a los requerimientos específicos de su operación.

Le invitamos a explorar nuestra completa gama de tambos metálicos y de plástico en el siguiente enlace: https://alveotrafiplastic.com/categoria-producto/contenedores/tambos/